Theodore Duncan, un residente de Carolina del Norte, acaba de ganar un premio de 10 millones de dólares en la lotería. Sus siguientes pasos serán retirarse trabajar, comprar la casa que siempre soñó y disfrutar de sus 12 nietos.
Theodore y su esposa fueron recibidos con vítores y alabanzas cuando se acercaron a las oficinas centrales de la Lotería NC Education a recoger su cheque de 10 millones de dólares.
“A mis 52 años y con la suma tan importante que he ganado puedo dejar de trabajar” “Voy a retirarme y a comprarme una gran casa con piscina, y parte del dinero se lo daré a mis 12 nietos” dijo Duncan.
Duncan es mecánico de profesión y vive en Oxford, pequeño pueblo del que por cierto no piensa mudarse. Cuando iba camino del vertedero a deshacerse de trastos viejos compró un “raspadito” de Colossal Cash de $10.000.000 en el Berea Mini Mart en U.S 158 West en Oxford. En el interior del vehículo raspó los números y entró en estado de shock, no podía creer lo que estaba viendo. Grite “Gané, Gané, Gané” pero era incapaz de apartar la vista del boleto. “Tuve que llamar a mi hermano para que viniera a recogerme ya que yo era incapaz de conducir”.
Theodore podía elegir entre cobrar la suma de 10 millones en 20 pagos anuales de 500.000 ó coger en efectivo algo más de 4 millones ya una vez descontados los impuestos, finalmente se decidió por el pago único.
Cuando los medios de comunicación le preguntaron si le iba a costar dejar el trabajo, Duncan no pudo evitar una carcajada. Asegura que tuvo la suerte de trabajar para una gran compañía, pero que lleva haciéndolo desde los 15 años y que piensa que ya es hora de dejar su puesto a otro candidato.
Soy jugador habitual de lotería, suelo comprar 3 ó 4 boletos a la semana y siempre le dije a la gente que algún día me tocaría. Por fin ese día llegó. Ahora toca disfrutar, ha dicho.
Hay que destacar que Theodore también planea donar $100.000 de su premio al St. Jude Children’s Research Hospital.
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